Domingo 11 de marzo, Salgo de mi casa a las 6 de la mañana, para estar en Balanegra a las 6 y media donde había quedado con Mustapha, para salir desde ahi para adra, donde habíamos quedado con Antonio a las 7. Cuando llega Mustapha, me suena el teléfono y una voz me pregunta que donde estoy, le contesto0 que en la rotonda de la cabac y me dice que es Juan y que me esta esperando con Antonio mas adelante. Ya los cuatro, salimos desde Balanegra, todos en bici, en direccion a Adra. Es de noche aun y tenemos que ir con las luces, pero se nos hace corto el camino y en poco estamos en Adra.
Las 7 de la mañana, comenzamos el ascenso hacia la parra, algunos ya empiezan a acusar la subida, son 7 kilometros de subida fuerte sin apenas descanso. Mustapha y Antonio se separan de Juan y yo, que me quedo para acompañarlo y darle ánimos, pero no hay manera de animarlo, cuando mas adelante encontramos a Mustapha y a Antonio esperándonos, le digo a Juan que no se pare, que siga, que si se para sera peor, pero es imposible combencerle, esta deseando echar pie a tierra. En esa primera parada, empieza ya a decir que le duele el culo, Mustapha le dice que coja su bici hasta arriba, que esta lleva una funda de gel para el asiento y que tal vez le vaya mejor. Asi lo hacen y Juan sale delante, parece que va mejor asi. Ya en la parra paramos un poco para coger aire y rapidamente salimos bajando hacia la rambla del barranco almerin, pero cuando llegamos a bajo, empiezan de nuevo las cuestas, nos encontramos con una subida bastante pronunciada, donde Antonio y Juan no pueden mas y se bajan de la bici para empujarlas. Yo les digo que si no pueden mas que lo mejor seria volverse ahora que estan aun cerca de adra, pero deciden seguir. Lo siguiente fue ya un poco suplicio para Juan que lleva bastante tiempo sin coger la bici, tanto por el dolor de culo, como por el dolor en general.
Lleguemos a Turón a las 11 de la mañana, donde comimos. Mustapha se fue delante porque ya era tarde y había quedado con unos amigos para comer al medio día y no podía ir a nuestro ritmo.
Ya de Turón para abajo fue todo bajada, y pudimos llegar aun teniendo que ir esperando a Juan que llevaba su cruz a cuestas del dolor de culo, tanto por no estar acostumbrado, como por el culot que apenas tenia badana.
Al final llegue a casa a las 2 del medio día, 8 horas de salida, 100 kilómetros, y hecho polvo, no por los kilómetros, sino mas bien por tanta parada.
La próxima sera mas dura.
Un saludo.
ALH